Del 7 al 18 de abril de 2010, se llevó a cabo la duodécima edición del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI).
Organizado desde 1999 por el Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, en cada edición, el BAFICI se consolida cada vez más como uno de los festivales de cine independiente de referencia a nivel internacional.
El objetivo del Festival es promover la producción audiovisual que en su gran mayoría circula por fuera del circuito comercial, a través de la exhibición de películas de realizadores ya conocidos y consagrados o de aquellos que intentan hacerse un lugar en el ámbito de la cinematografía.
Durante la jornada de cierre, en el Samsung Studio, se realizó la ceremonia de entrega de premios de las películas ganadoras. Además se dieron a conocer las películas que fueron elegidas por el público: en la Selección Internacional, fue la película de animación Mary and Max de Adam Elliot la que obtuvo la mayoría de votos; y en la Selección de Competencia Argentina la ganadora fue El ambulante, de Eduardo de la Serna, Lucas Marcheggiano y Adriana Yurcovic
Por otra parte, Aire solo sería, de Martín Morgenfeld fue seleccionada en la categoría cortometrajes y el film Kerity, la Maisón des Contes, de Dominique Monféry, fue la elegida en la sección BAFICITO.
En esta edición del Festival se presentaron 422 películas: 105 cortos, 36 medios y 281 largometrajes, de 48 países diferentes, en 12 sedes en distintos puntos de la Capital Federal. Además se llevaron a cabo múltiples actividades especiales como charlas con directores, mesas redondas de debates, seminarios y talleres.
Alrededor de 280 mil personas se acercaron durante los 11 días que duró el Festival a las múltiples y diversas actividades que se llevaron a cabo. Este dato pone en evidencia el enorme interés que genera este tipo de eventos culturales en la sociedad argentina. Además instalan al BAFICI como el festival de cine independiente más importante de la región.
Un ejemplo de cómo con continuidad de proyectos, sin importar de quién haya sido la idea original, se puede organizar en evento de semejante envergadura con seriedad.
Nota vinculada: El arte de contar la historia detrás de la historia
Organizado desde 1999 por el Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, en cada edición, el BAFICI se consolida cada vez más como uno de los festivales de cine independiente de referencia a nivel internacional.
El objetivo del Festival es promover la producción audiovisual que en su gran mayoría circula por fuera del circuito comercial, a través de la exhibición de películas de realizadores ya conocidos y consagrados o de aquellos que intentan hacerse un lugar en el ámbito de la cinematografía.
Durante la jornada de cierre, en el Samsung Studio, se realizó la ceremonia de entrega de premios de las películas ganadoras. Además se dieron a conocer las películas que fueron elegidas por el público: en la Selección Internacional, fue la película de animación Mary and Max de Adam Elliot la que obtuvo la mayoría de votos; y en la Selección de Competencia Argentina la ganadora fue El ambulante, de Eduardo de la Serna, Lucas Marcheggiano y Adriana Yurcovic
Por otra parte, Aire solo sería, de Martín Morgenfeld fue seleccionada en la categoría cortometrajes y el film Kerity, la Maisón des Contes, de Dominique Monféry, fue la elegida en la sección BAFICITO.
En esta edición del Festival se presentaron 422 películas: 105 cortos, 36 medios y 281 largometrajes, de 48 países diferentes, en 12 sedes en distintos puntos de la Capital Federal. Además se llevaron a cabo múltiples actividades especiales como charlas con directores, mesas redondas de debates, seminarios y talleres.
Alrededor de 280 mil personas se acercaron durante los 11 días que duró el Festival a las múltiples y diversas actividades que se llevaron a cabo. Este dato pone en evidencia el enorme interés que genera este tipo de eventos culturales en la sociedad argentina. Además instalan al BAFICI como el festival de cine independiente más importante de la región.
Un ejemplo de cómo con continuidad de proyectos, sin importar de quién haya sido la idea original, se puede organizar en evento de semejante envergadura con seriedad.
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